La minería y la horticultura: base de la economía colonial en el norte de la Nueva España
DOI:
https://doi.org/10.60685/filha.v12i17.2330Palabras clave:
asentamiento, minería, horticultura, apropiaciónResumen
La ciudad de Zacatecas surgió como un asentamiento enfocado a la explotación de minerales, sin embargo, la población generó estrategias para apropiarse del entorno aplicando conocimientos técnicos y culturales heredados para adaptarse y favorecerse de los recursos que ofrecía el medio ambiente. La estrategia más eficaz y generalizada fue la instauración de huertas, en las cuales se cultivaron productos de arraigadas tradiciones para los diferentes grupos que participaron en la formación del asentamiento (españoles, tarascos, mexicas y tlaxcaltecas), forjando con ello un paisaje variado y colorido que con el tiempo sentó las bases de la alimentación tradicional zacatecana. Partiendo de la hipótesis de que las huertas zacatecanas se estructuraban de una combinación de productos hispanos e indígenas, tanto en el sentido estético como el alimentario, que acompañaron las actividades cotidianas y celebraciones de la población, se realizaron muestreos de suelo asociados a espacios coloniales de trabajo hortícola de las cuales se rescataron restos macrobotánicos que permitieron la identificación de cultivos arraigados a los patrones preferentes de consumo de cada grupo. Con base al registro arqueológico, histórico y botánico se pudo reconstruir el paisaje hortícola relacionado con el origen y consolidación de la sociedad zacatecana. De esta forma se llega a la conclusión de que las sociedades mineras se establecieron con el interés de explotar los yacimientos; sin embargo, lo que determinó el patrón de apropiación y construcción del espacio habitado fue el abasto alimenticio, donde las huertas jugaron un papel destacado.