Abstract
El dolor es una sensación desagradable, los fármacos se utilizan como terapia pero es frecuente la fármaco-resistencia. El consumo de grasas polinsaturadas omega-3 (Ѡ-3) como el ácido docosahexanoico (DHA) y el eicosapentanoico (EPA) se ha asociado a efectos benéficos, poco se conoce respecto al efecto del consumo de aceite de pescado (con alto contenido de DHA y EPA) durante la etapa fetal sobre la respuesta a dolor en la vida extrauterina. El objetivo del estudio fue evaluar en un grupo suplementado con aceite pescado durante la etapa fetal (a través de la madre) la respuesta a un estímulo doloroso en la vida adulta. Los resultados se compararon con otro grupo suplementado con aceite de palma y un grupo control. El grupo que recibió aceite de pescado registro menor número de respuestas que los otros dos grupos (p<0.05). Conclusión.- El consumo de aceite de pescado modifica la respuesta a dolor.