Rilke y la educación
DOI:
https://doi.org/10.48775/rco.v10i20.1074Palabras clave:
Rilke, educación, humanoResumen
Humano no es de inmediato un objeto, es primeramente un problema, en el sentido griego (luego desarrollado por Gaston Bachelar): a saber, un obstáculo epistemológico. ¿Queremos saber qué es un ser humano? Antes de decírnoslo tendríamos que borrar lo que creemos o imaginamos o nos han dicho que somos (en el supuesto de que nos reconozcamos vagamente en cuanto tales). Lo humano es percibido como un estorbo para saber las cosas a ciencia cierta. lo humano tiene que “hacerse transparente y transitorio”, como señala Hans Blumerberg, a fin de dar lugar a un auténtico saber. Si nos importa saber lo que somos es porque hay desde luego otras cosas importantes por saber; y por saber con absoluta certeza, pues el conocimiento no es un juego. ¿No lo es? No para ciertas formas de concebir el trabajo del pensamiento.